Translate

About Me

Mi foto
Muramasa
-
Ver todo mi perfil

Status

Leyendo:

  • No te escondo nada - Sylvia Day

Jugando:

  • Digimon World DS
  • Castlevania GBA
  • Fallout 3
  • Pokémon Blanco

Viendo:

  • The Legend of Korra B3E02

Sígueme en Twitter

Licenciado en Química | Dibujante y escritor a ratos

This is 100% Derpy approved
  • Diada Nacional de Catalunya en TDD-1Halloween en TDD-1Navidad en TDD-1 Sant Jordi en TDD-1

Archives

Sandeces-box


Lista de mis "Ayudantes Virtuales"

TDD-1

Powered By Blogger

Changelog

  • 01/09/2014 - Añadidos share buttons
  • 08/12/2013 - Añadida publi lateral
  • 07/09/2013 - Cambio de cabecera
  • 31/08/2013 - Reforma del Blogroll
  • 31/08/2013 - Cambio en el diseño de entradas
  • 30/08/2013 - Añadida Navbar
  • 30/08/2013 - Añadidas "Reacciones"
  • 28/07/2013 - Cambio de template

Pocket Tales of the Braves - Capítulo 16

martes, 20 de noviembre de 2012

Capítulo 16: Bellsprout monk

Continente de Johto
Torre Bellsprout


El entrenador le ofreció a Ryuuna pociones y todo lo que necesitase para recuperar el estado y los puntos de salud sus pokémon, al mismo tiempo que recuperaba su propio equipo. Ella con su Larvitar y su Dratini y él con su Chikorita, su Totodile y su Cyndaquil, la columna del medio seguía moviéndose a su ritmo, al ritmo del viento que soplaba en Ciudad Malva.

"¿Te importa si te acompaño?" le preguntó el chica a Ryuuna, "Tras cada combate puedo restablecer el estado de tu equipo, si te retan no me entrometo y si me retan no te entrometes, si nos retan a dobles, aceptamos. ¿Te parece bien?" dijo el chico.

Ryuuna se lo pensó. Era una buena oferta para no tener que estar de un lado para otro después de cada combate, centro pokémon arriba, centro pokémon abajo. Además le permitiría ver cómo luchaban los otros entrenadores en la vida real, porque lo que ella veía solía ser competiciones regladas de profesionales. "Acepto. Por cierto, ¿cómo te llamas? Yo soy Ryuuna, y un día seré la campeona de Kanto y Johto."

"Mi nombre es irrelevante, aunque los que me conocen me llaman Blasi, puedes llamarme así si quieres" dijo el chico. "Blasi, me parece bien" dijo Ryuuna. Con qué tipo tan raro había ido a topar. Y ya hechas las presentaciones pertinentes siguieron caminando por la torre, esta vez tomaron unas escaleras de bajada. A lo lejos, desde las mismas, Ryuuna divisó al monje que había visto al entrar en la torre, estaba cerca de la entrada sentado en el suelo meditando. Los separaban unas vallas altas, de madera, muy decorativas y rústicas. Nunca hubiera dicho al entrar que eso eran vallas.

Avanzaron por el único pasillo por el que podían acceder, en la primera planta reinaba la calma; el camino terminaba con unas escaleras que señalaban hacia el segundo piso, Ryuuna y Blasi ascendieron de nuevo al segundo piso, pero esta vez en una localización distinta. Era un pasillo casi claustrofóbico, de no ser porque una de sus paredes era otra de las vallas rústicas de madera que habían visto en el primer piso. Allí un monje esperaba, meditando, poder retar a los que pasaban. Blasi dijo "Déjamelo a mí" mientras con su mano izquierda bajada hizo un gesto a Ryuuna para que se detuviese. Blasi caminó solo hasta el monje, Ryuuna lo seguía aunque despacio.

"¡Ah...!¿Deseas combatir, entrenador de pokémon?" dijo el monje de repente, abriendo los ojos, sobresaltando a Ryuuna. Blasi hizo un gesto afirmativo con la cabeza. "¡Que así sea!" exclamó el monje, mientras levantaba el brazo y señalaba arriba, entonces sacó una pokéball y envió a su pokémon "¡Adelante Bellsprout!". Blasi por su parte envió a Cyndaquil pensando "esto va a ser rápido".

"¡Cyndaquil, Ascuas!" gritó Blasi.

De la boca del Cyndaquil salió disparado un fragmento de llama que apuntaba hacia el Bellsprout. Parecía que iba a darle de lleno, con lo que Blasi bajó la guardia, sin embargo de forma casi imperceptible el cuerpo del Bellsprout hizo un movimiento de vaivén, como las columnas de Torre Bellsprout, y esquivó el ataque. El ascua tocó el suelo y se apagó.

"¡Cyndaquil, Placaje!" ordenó Blasi. El monje no dijo nada ni dio ninguna indicación al Bellsprout, de hecho, ni se inmutó. El Cyndaquil se acercaba peligrosamente al pokémon tipo Planta(/Veneno), saltó para realizar el placaje, pero en ese momento el Bellsprout arqueó su cuerpo hacia atrás, pasando el Cyndaquil por encima suyo, y seguidamente se incorporó.

"¡De nuevo, Cyndaquil!" gritó Blasi. El Cyndaquil tomó tierra y se deslizó unos centímetros, mientras daba la vuelta para reanudar su ataque. El Bellsprout se había desplazado cerca de él y al iniciar su ataque el pokémon planta le hizo la zancadilla. El Cyndaquil perdió el equilibrio y se dio un morrazo contra el suelo. "No pensabas que un pokémon planta podría oponer tanta resistencia contra uno de fuego, ¿verdad?" dijo el monje. "Ahora mismo debes estar pensando en varias estrategias para intentar combatir la flexibilidad de mi Bellsprout, sabes que la potencia no te servirá de nada, así que probarás con velocidad... ¿me equivoco?"

Ryuuna reaccionó, "¡Usa Pantallahumo, Blasi!". No sabía exactamente qué era lo que le empujaba a gritar eso, pero sabía que si lo hacía pasaría algo positivo. Blasi cerró los ojos, y en la medida que pudo, su oído. Reflexionó, o se concentró, tal vez, y de pronto abrió los ojos de nuevo, "¡Cyndaquil, Pantallahumo!" Ahora lo veía claro, si usaba Pantallahumo el Bellsprout perdería visión y con esa enorme boca tragaría humo y se desconcentraría, la ocasión perfecta para darle el toque final.

De la boca del Cyndaquil se desprendió una densa nube de humo negro en dirección al Bellsprout. Sin embargo, éste usó Látigo Cepa para disipar el humo creado. La estrategia era muy diferente de la que había pensado Blasi, pero ya le servía.

"¡Cyndaquil, Ascuas!". El Bellsprout fue deteniendo el movimiento rotatorio, pero no estaba al tanto del ataque del Cyndaquil. El monje gritó "¡Cuidado, Bellsprout!", pero lo único que consiguió fue despistar a su propio pokémon, que fue abatido de lleno por las ascuas. El monje retiró su pokémon debilitado a su pokéball y sacó otro pokémon, que resultó ser otro Bellsprout.

Esta vez Blasi ordenó a su pokémon que se mantuviera cerca del Bellsprout. El Cyndaquil se aproximó hasta el Bellsprout sin atacar. El calor emitido por la espalda del Cyndaquil empezó a ser detectado por el Bellsprout, que por instinto se apartó, El Cyndaquil lo persiguió, hasta que el Bellsprout tropezó con sus propias raíces y cayó al suelo. "Vuelve, Bellsprout" dijo el monje mientras lo apuntaba con su pokéball, el rayo de energía rojo tocó al Bellsprout, que regresó a su ball.

"Bien, ha sido un combate emocionante" admitió el monje. "Lo mismo digo" reconoció Blasi.


Mochila:
- Pokéball x5
- Baya Aranja x6
- Baya Atania x2
- Baya Zreza x2
- Baya Safre x2
- Saco de dormir
- Zapatos

Equipo:
- Dratini (Mudar) MV: Atadura - Malicioso - Onda Trueno - Ciclón
- Larvitar (Agallas) MV: Mordisco - Malicioso - Torm. Arena - Chirrido
- Huevo Misterioso